¿Sin cicatriz que curar? Lazzarotto habla sobre su llegada a la CANACO
Aunque intentó restarle importancia a la idea de una “operación cicatriz” tras su elección, Alejandro Lazzarotto terminó reconociendo —entre líneas— que no todos quedaron conformes con el proceso que lo llevó al cargo. “¿Operación cicatriz? Yo dije, ¿cuál cicatriz?
Nada, pues yo no le hice daño a nadie”, aseguró, en una declaración que busca pintar un escenario sin fracturas… pero que luego matiza.
Y es que, tras negar la existencia de heridas, Lazzarotto admite que “sí hay que hablar con los actores” es algo que habrá de hacerse, en franca alusión a figuras como Sahir Rentería, uno de los perfiles que quedó fuera del proceso.
Lazzarotto dice haber sido respetuoso y haberse mantenido al margen del jaloneo interno, cuidando que su nombre no se viera envuelto en conflictos.