Gilberto Loya: su retorno a las mañaneras con discursos vacíos en medio de la violencia

Gilberto Loya: su retorno a las mañaneras con discursos vacíos en medio de la violencia

El secretario de Seguridad Pública del Estado, Gilberto Loya Chávez, retomó sus conferencias matutinas en un intento por reafirmar el control gubernamental sobre la crisis de seguridad en Chihuahua.

Sin embargo, lejos de ofrecer estrategias claras o resultados tangibles, sus declaraciones se convirtieron en un ejercicio de divagación, mientras la violencia sigue escalando en la entidad.Loya insistió en que la mancha urbana de Ojinaga permanece tranquila, aunque reconoció que Coyame del Sotol sigue siendo escenario de enfrentamientos entre grupos criminales.

“Ahí nos estaremos hasta recuperar todo el territorio”, aseguró, sin detallar cómo ni cuándo se lograría dicho objetivo.

Cuestionado sobre un video que circula en redes sociales mostrando un violento enfrentamiento entre grupos antagónicos, el funcionario minimizó la relevancia de estas imágenes, calificándolas como “apología del delito” y una estrategia de los delincuentes para amedrentarse entre ellos. “

Nosotros no nos hemos amedrentado”, dijo, como si con esa declaración se resolviera el clima de terror que persiste en la región. Mientras tanto, la realidad golpea con cifras alarmantes.

Durante el fin de semana pasado, Chihuahua registró 17 homicidios, convirtiéndose en la segunda entidad más violenta del país, solo por debajo de Guanajuato.

La situación en Coyame es crítica: los habitantes han denunciado en reiteradas ocasiones la presencia de personas armadas que instalan retenes en la carretera, evidenciando el control que el crimen organizado mantiene sobre ciertas zonas del estado.

El problema de las conferencias de Loya no es solo la falta de autocrítica, sino la ausencia de estrategias concretas para combatir la crisis de inseguridad. El funcionario insiste en narrativas de estabilidad que no se reflejan en la vida cotidiana de los chihuahuenses. Los discursos no sustituyen las acciones, y mientras la Secretaría de Seguridad Pública siga enfocándose en la retórica en lugar de resultados, Chihuahua seguirá ocupando los primeros lugares en violencia.

El regreso de las “mañaneras” de Loya solo confirma lo que ya se sabía: el gobierno estatal sigue sin una estrategia clara para enfrentar el crimen organizado, y los ciudadanos continúan atrapados entre la retórica gubernamental y la cruda realidad de la violencia.