La elección judicial y el acomodo de los discursos

La elección judicial y el acomodo de los discursos

La primera elección judicial en México dejó más declaraciones que votos.

Con una participación del 13%, cada actor político ajustó el discurso a su conveniencia.

Arturo Medina, desde el PRI, habló de “fraude judicial” y consideró que la abstención fue una muestra clara de rechazo ciudadano al intento de Morena por desmantelar la división de poderes.

Para él, el 87% que no acudió a las urnas se manifestó con fuerza silenciosa.

En contraste, Maru Campos, sin levantar el tono, asumió el dato con pragmatismo: “ya se esperaba baja participación”, dijo, dejando entrever que el proceso no despertó mayor interés entre la población, pero sin dramatizar.

Del lado de Morena, Cuauhtémoc Estrada sacó la narrativa institucional: “un año y un día haciendo historia”, dijo, al vincular la elección judicial con el aniversario del triunfo de Claudia Sheinbaum.

Para el coordinador morenista, más de 13 millones de votos bastan para afirmar que ahora sí, por primera vez, los tres poderes del Estado son electos por el pueblo.

Tres posturas, un mismo evento, y un termómetro que no termina de calibrarse.

Si la legitimidad se mide en votos o en narrativa, cada quien la interpreta según su campo de batalla.

Maru activa diplomacia ganadera… y le pide ayuda al cielo

El tema ganadero volvió a escena. A más tardar en quince días, inspectores del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) llegarán a México para revisar el cumplimiento de los protocolos sanitarios contra el gusano barrenador, y evaluar si reabren —o no— la frontera al ganado mexicano.

En ese contexto, la gobernadora Maru Campos salió a marcar presencia.

Desde su trinchera, Campos Galván recordó que ha habido diálogo directo entre la Secretaría de Agricultura federal, encabezada por Julio Berdegué, y su contraparte en Estados Unidos, Brooke Rollins.

Gracias a esa gestión, se espera que la comisión técnica pise suelo chihuahuense para inspeccionar cuarentenarias y ver de cerca el esfuerzo en contención sanitaria.Mientras tanto, la mandataria mantiene el discurso de control y responsabilidad.

El Programa Estatal de Vigilancia, lanzado el 21 de mayo, puso en circulación un operativo de 60 unidades, 23 volantas, 27 médicos veterinarios de campo y decenas de kits de inspección en las regiones clave.

Pero más allá de cifras y protocolos, la gobernadora no pierde el toque de tierra: “hay que seguirle pidiendo al de arriba que nos mande lluvia”, dijo, entre lo técnico y lo simbólico.

En lo económico, el golpe es claro. Mauro Parada, secretario de Desarrollo Rural, calculó que la veda deja pérdidas de hasta 5.2 millones de dólares diarios, lo que equivale a más de 101 millones de pesos al día.

Una cifra que pone presión en todos los frentes: producción, comercio y gestión binacional.

Pro vida vs. derechos reproductivos: se reaviva el debate legislativo

El cierre del segundo periodo ordinario en el Congreso del Estado no pasó sin sobresaltos.

La bancada del PAN aprovechó el micrófono para reafirmar su compromiso con la agenda “pro vida y familia”, lo que reavivó un viejo debate que parecía enfriado, al menos en la arena legislativa.

El protagonista panista fue Carlos Olson, identificado como el perfil más conservador de la fracción blanquiazul, quien detalló desde tribuna un paquete de 12 iniciativas con enfoque humanista.

Entre ellas, destaca la propuesta de la Ley de los Derechos de la Persona No Nacida, que busca reconocer jurídicamente la vida desde la concepción, además de una pensión prenatal obligatoria dirigida a combatir el abandono durante el embarazo.

Del otro lado, la respuesta vino de Jael Arguelles, legisladora de Morena, feminista autodeclarada y médica de profesión.

Su postura fue clara: el Estado no debe imponerse como camisa de fuerza, sino garantizar el ejercicio pleno de los derechos de las mujeres.

El intercambio, aunque contenido en forma, fue encendido en fondo.

El resto de las bancadas prefirió dejar correr la discusión, probablemente por el desgaste acumulado de una jornada legislativa extensa.

Lo cierto es que el PAN parece decidido a mantener viva su bandera en temas que para algunos representan retrocesos, y para otros, convicciones.

En cambio, Morena seguirá empujando su tesis del Estado garante y no inquisidor.

El choque está planteado, y en una legislatura de correlación dividida, el campo de batalla será el dictamen… o la congeladora.

Fentanilo en Chihuahua: alerta encendida en la sierra

El anuncio del secretario de Seguridad Pública del Estado, Gilberto Loya Chávez, prendió los focos rojos: se han detectado laboratorios clandestinos de fentanilo en distintas zonas de Chihuahua, confirmando una preocupación que venía latente desde hace meses.

El primer hallazgo ocurrió en Guadalupe y Calvo, en la sierra, donde se aseguraron tabletas ya elaboradas y precursores químicos.

Luego, en la ciudad de Chihuahua, se incautaron cinco kilos de fentanilo puro, cantidad suficiente para millones de dosis, dada la alta concentración de esta sustancia.

Y más recientemente, en Moris, al noroeste del estado, se localizaron 8 mil litros de precursores, lo que sugiere capacidad para producción a gran escala.

Aunque hasta ahora no se han identificado laboratorios en Ciudad Juárez o el Valle, el propio Loya Chávez admitió que es un escenario posible, considerando la movilidad del crimen organizado.

A esto se suma la advertencia sobre la presencia creciente de grupos delictivos externos, con incursiones en tres regiones críticas: Guadalupe y Calvo, Ojinaga-Manuel Benavides y Moris, zonas clave tanto por su geografía como por su ubicación estratégica para el tráfico.

La respuesta estatal ha sido el reforzamiento de la vigilancia y la coordinación con autoridades de Sonora para contener el llamado “efecto cucaracha”, es decir, el desplazamiento de grupos criminales a zonas menos presionadas.

El mensaje es claro: el fenómeno ya no es exclusivo de otros estados. El fentanilo ya está aquí, y el mapa del crimen se está reconfigurando.